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Marco Antonio Figueroa: "Nadie me quita de la cabeza que el descenso de Cobreloa no fue deportivo"

  • Fútbol Nacional

El ex director técnico de Cobreloa recordó el descenso de la escuadra naranja.

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Cobreloa cumplió siete años en la Primera B tras bajar de categoría en la temporada 2015. La situación fue recordada por Marco Antonio Figueroa, entrenador que descendió con la escuadra naranja.

"Matemáticamente Cobreloa no descendía, estábamos tres puntos arriba. Nos quitaron tres puntos para que quedáramos emparejados junto con Ñublense y Arica. No había forma de que Cobreloa descendiera. Por eso nos quitaron esos puntos. Aunque Cobreloa perdiera ese partido, por la diferencia de goles, no descendía. No había forma", partió diciendo en conversación con Redgol.

"Han pasado siete años. Me querían castigar por cincuenta partidos, al final fueron doce, injustamente. Con todas las pruebas que les dimos, aun así me castigaron y descendieron a uno de los clubes más importantes de Chile", agregó el estratega de la Selección de Nicaragua.

El 'Fantasma' hizo énfasis en el tema reglamentario que le costó el descenso a Cobreloa (perdió tres puntos por decisión del Tribunal de Disciplina). "Con un reglamento que estaba estipulado para el técnico y no estaba estipulado ni para un auxiliar, ni para un preparador físico. Esa norma era exclusivamente para el técnico, que si habías estado en otro club no podías registrarte en otro".

"Lo sacaron del sombrero o el as bajo la manga, sacaron que sí era antirreglamentario. Y nos bajaron, así de simple. Porque después, en el partido que decidía algo en Arica (San Marcos vs Audax Italiano) no pasaban la mitad de la cancha", añadió Figueroa.

Finalmente, Marco Antonio Figueroa se refirió al incidente del micrófono, en donde insultó a los directivos de Ñublense. "Cuando vino la famosa agarrada de micrófono es que uno como ser humano ve que tu equipo y que tú como profesional están siendo perjudicados, y no es fácil asimilar tanto castigo. Lo asumí, pedí disculpas a quienes ofendí, pero nadie me saca de la cabeza que esto de Cobreloa no fue un descenso deportivo, fue de mesa".

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